El pasado 22 de abril el director de Alberche Abogados, Carlos Javier Galán, recibió de manos de la Decana del Colegio de Abogados de Madrid, Sonia Gumpert, el diploma en reconocimiento a sus 25 años de pertenencia a la corporación. La entrega tuvo lugar en el marco de los VIII Encuentros Internacionales de Madrid, cuyo acto solemne se celebró en el salón de actos del Ateneo.
Le correspondió hablar en nombre de todos los compañeros que cumplían junto con él sus bodas de plata con la profesión -Marcelo Belgrano, Ana Clara Belio, Héctor Cachero, Francisco de Asís Esteban, Ana Ferrer-Sama, Miguel Ángel Hortelano, Blas J. Imbroda, Santiago Mediano, Miguel Jesús Sánchez y Julio Gabriel Sanz-.
En su intervención definió la tarea del abogado como la “enorme responsabilidad” de “poner voz, que es tanto como decir poner fundamentos jurídicos, razones y argumentos, a los intereses y los derechos de quienes confían en nosotros”.
Reivindicó el papel de los Colegios profesionales como “salvaguarda de las señas de identidad” de la abogacía. Está convencido de que “todas las alternativas a los Colegios son peligrosas y mucho menos deseables: en un extremo, la mercantilización absoluta de la profesión; en el otro, que ese necesario control se ejerciera desde el intervencionismo de los poderes públicos, con mengua de nuestra independencia”. Para Carlos J. Galán, los Colegios profesionales “representan la autorregulación de la profesión, desde la libertad y desde la responsabilidad, y por ello tenemos que defenderlos y cuidarlos, por interés de los profesionales, pero también por garantía de los ciudadanos y por el bien común de la sociedad”.
Animó a los que ese día juraban como nuevos letrados a no perder nunca “esa especie de cuidado artesanal del principio”. “Por mucho tiempo que pase y muchos casos que llevéis -les pidió-, no los convirtáis nunca en un número. Haced de cada caso algo singular, poned en cada uno de ellos lo mejor de vuestra capacidad y de vuestro oficio”.
Terminó felicitando a sus compañeros en este reconocimiento colegial “por 25 años de independencia, de esfuerzo, de constancia, de superación, de sinsabores y de éxitos. Por 25 años de dedicación a esta profesión, exigente pero apasionante, ingrata pero hermosa”.